Los cuentos y leyendas de diferentes clases han sido una gran parte de la pintoresca historia de nuestros paises, especialmente en todo lo que es de la América de habla hispana.
Encontramos leyendas de tipo religioso que nos eran pasadas de generación en generación, verbalmente, y de esa manera nos mantenían atemorizados para así seguir los preceptos religiosos al pie de la letra.
Otra clase eran los cuentos o leyendas que nuestros padres usaban para mantenernos dentro de una línea de respeto y obediencia.
Esta vez les voy a contar una leyenda que nuestros padres usaban para que las hijos mantengan la limpieza de la casa a un alto nivel, porque, en nuestro tiempo de infancia, eran los hijos los encargados de mantener la limpieza de las casas., los varones se encargaban de las labores más pesadas, mientras las mujeres se dedicaban a mantener los dormitorios en orden y la cocina.
LA LEYENDA DE LENGUA NEGRA.
Las niñas eran las encargadas de retirar los platos de la mesa y luego lavarlos y dejarlos ordenados en los anaqueles que había para esto.
Decía la madre «no se olviden de lavar los platos, porque sino viene Lengua Negra a lamer las sobras que quedan».

Con esta sentencia las niñas se esmeraban en lavar los platos e irse a dormir temprano, para no encontrarse algún día con el Lengua Negra.
Un día le pregunté a mi madre, ¿ qué es eso del Lengua Negra», y mi madre me contestó,
— Yo nunca lo he visto, pero he crecido con esta leyenda toda mi vida., una vez cuando Yo tenía tu edad, le hice la misma pregunta a mi madre, y ella me contó, que una familia de ella había tenido el encuentro con el lengua negra, Las niñas tenían la mala costumbre de dejar los platos sucios, para lavarlos al día siguiente, una noche una de las niñas se levantó a buscar agua a la media Noche y allí se encontró con el Lengua Negra, era una clase de lobo dantesco muy grande que se encontraba lamiendo los platos sucios, la niña cayó al piso, botando espuma por la boca y con los ojos desorbitados por el terror. A la niña le tomó mucho tiempo para recuperarse de este susto.

Para curarla, recurrieron a la curandera de la ciudad, y esta les contó que lo peor no era solamente ver al Lengua Negra, lo que mucha gente no sabía era que este ser, lamía los platos de tal manera que parecía que los habían lavado, pero lo malo era que las salivas dejadas por el animal en los platos y que las personas los volvían a usar nuevamente, al ser ingeridas por los seres humanos, cambiaba su comportamiento, y se volvían agresivos, una clase de rabia, pero que atacaba solamente a la mente, no al cuerpo.
Esta familia después de saber esto llevó al resto de sus hijos a donde la curandera, pero lamentablemente, de cuatro hijos solamente dos pudieron ser salvados, los otros dos terminaron en un sanatorio, con sus cualidades mentales alteradas.—

Como digo estas son solamente leyendas pasadas de boca en boca y no hay pruebas de que esto algun dia fue verdad, o sea no es que no sea verdad, pero que no quedaron pruebas fisicas o escritas de estos hechos.
—Valente Delmar.