Esta vez solamente quiero exponerles aquí el pensamiento real de un inmigrante forzado a vivir en los Estados Unidos y la cruel realidad de todos los que se han visto forzados a llegar a este país.
Espero que el señor Rob Ace, no se moleste por publicar su escrito.
Buenos días mi estimados hermanos. Hoy 4 de Julio se celebra la independencia de los EEUU. Salen a relucir por doquier las banderas y los “orgullos patrios” de sus ciudadanos, entre más grande la bandera mejores ciudadanos se sienten.
Yo vivo en este país y yo no celebro el cuatro de Julio, pues no estoy en este país por voluntad propia. Cuando salí de mi país, mi padre se encontraba muy enfermo, sin trabajo, mis hermanos menores y mi madre pasaban por momentos difíciles económica y emocionalmente, ya que nos la mirábamos difícil por el bloqueo criminal del imperio. Las políticas intervencionistas de este país, me obligaron a separarme de mis seres queridos, de mis amigos, de mi padre que por cierto mire llorar por primera vez cuando nos despidió en el aeropuerto. Ahorita se me salen las lagrimas con recordar ese momento, me separaron hasta de mis perros con los que tenía un gran apego.
Yo no puedo celebrar a un país que solo ha traído tristezas a mi vida y la de millones de ciudadanos en mi país Nicaragua. No puedo celebrar a quien se robó mi juventud, que me separó de todo lo que yo quería, que me quiso hacer creer que ellos eran los buenos y mis compañeros sandinistas eran los malos. Que se robó mi futuro al lado de mi padre, que se robó el futuro de mi madre de poder gozar de su negocio y no tener que trabajar en este país como esclava para subsistir. No tengo nada que celebrar ni agradecer a este país, ellos se han robado mi felicidad y la de toda mi familia, se han robado los recursos naturales de tantos países del mundo, recursos que hoy, le permiten a la población de este país “celebrar” cómodamente desde los patios de sus casas y creerse los mejores del mundo.
Un país que asesino a millones de nativos, que esclavizo a los negros, que discrimina a las minorías, que le quita al pobre para darle al rico y prefieren tirar al desempleo y manda a vivir en las calles a los ciudadanos comunes para después llenarse la boca hablando de Elon Musk, Jeff Bezos y los grandes millonarios de este país y sus “grandes hazañas.
Ese “Sueño Americano,” del que tanto hablan, especialmente los anglosajones, se lo deben al sufrimiento de los pueblos y recursos del mundo. Ese “Sueño Americano,” lo pude haber logrado en mi propio país, a la par de los míos si no hubiese sido por la maldad del yanqui. Así es que no me vengan con celebraciones a un país que nos ha invadido tantas veces, que asesinó y sigue matando el sueño de tantos jóvenes, que sigue separando a las familias, que sigue promoviendo bloqueos en contra de Mi Pueblo, que sigue en acecho del mejor momento para hacernos daños.
Así es que, hermano, que celebre su madre, yo celebraré el día de que La Patria Grande sea libre del imperio del mal PARA SIEMPRE.
Rob Ace.
Esto es lo que es en realidad el imperio del norte, un país asesino, y forjador de migraciones forzadas, después de haber destruido países, y lograr una supuesta libertad, que no es si no esclavitud.
Y así como pasó con Nicaragua, le sucedió a muchos países en el mundo.
—Valente Delmar—